En Puente de Dios la fuerza del agua abrió, con el tiempo, “la puerta” para entrar a este mágico lugar. 

Descender por la montaña y dar un pequeño salto, o rodear el lugar caminando, nos permite llegar a esta maravillosa formación rocosa. De un color azul intenso e increíblemente transparente, el agua cálida de esta poza, está rodeada por una suerte de santuario de estalactitas y estalagmitas.

Al interior de esta caverna, en la que los rayos del sol penetran por esa “puerta” creada de forma natural, nos espera un maravilloso espectáculo lumínico provocado por la luz que atraviesa el agua y termina danzando proyectada en las paredes del interior de este increíble lugar. Si tenemos suerte podremos observar, también, la presencia de vencejos que ahí se alojan.

Después, visitaremos a “Don Mayo”, donde conoceremos el proceso de extracción de jugo de caña de manera artesanal, mediante el trapiche, pudiendo degustar jugo de caña recién hecho y otros productos que ahí se elaboran.

Nuestro siguiente destino son las increíbles Cascadas de Tamasopo. El sonido de la caída de agua de estas cascadas resulta espectacular. La abundante vegetación sirve de escenario para mostrarnos este grupo de cascadas que se deslizan sobre las rocas tomando diferentes caminos y generando una suave brisa que lo refresca todo. Un lugar ideal para los más pequeños de la familia, pero también para los aventureros que deciden saltar por un costado de la cascada y sumergirse en el increíble color de sus aguas.